sábado, 19 de febrero de 2011

"Una tormenta es un infierno de soledad"


En su refugio madrileño, en Pacífico,
nace una avenida que parece
conducir al cielo. Al cielo de Madrid.
Apenas cuatro carriles absorben
un bullicio incesante; día y noche.
No para la vida. Por mucho que Manuel
trate de detenerla. Guerra perdida. Hoy
trata de combatir en otra, ante una gripe
que apenas le deja esculpir un fino hilo de
voz. Pero tiene tiempo hasta el concierto.
–Y eso que me habías avisado, pero
la sorpresa al oírte ha sido brutal.

–Coger una gripe y estar solo, lejos de los
tuyos, es lo peor, muy raro.
–¿Por qué Madrid?–Me vine hace más de seis años porque
me enamoré de una madrileña, me casé,
me divorcié y tuve una pequeña madrileña
que ahora tiene cuatro años. He tenido
momentos de mucha felicidad y otros de
no tanta, porque Madrid es una ciudad
con muchos matices y contrastes.
–¿La soledad que la rodea te parece
mala?
–Es de lo peor, porque cuando pasas una
tormenta estás como dentro de un infierno
de soledad. Madrid no es bueno para estar
en una tormenta.
–¿Cómo son los aromas de tu hogar?
–Muy agradables. Cuando pasas esa mala
racha no te queda otra que buscar un hogar
nuevo; y mi pequeño paraíso cotidiano,
mi piso, es un reducto de armonía y
calma. Estoy contento por poder reconstruir
los cimientos de mi vida.
–¿Qué es el tiempo?–Algo que me da miedo. Miedo a su paso,
a hacerte mayor, a que cada día muera ese
niño que llevas dentro de ti. Me aterra ver
fotografías y ver cómo evolucionamos.
–¿Cómo se le roba tiempo al tiempo?–(Se ríe). Con astucia y buen humor. Si el
día tiene 24 horas, ¡vamos a por ellas! Creo
que es una manera de ganarle, aunque es
una partida que está vencida. Soy de los
que sueña con una máquina del tiempo.
–¿Cómo lo aprovechas?–De lunes a viernes tengo la vida cotidiana
de cualquier hijo de vecino; por la tarde es
cuando preparo mis conciertos.
–¿Deshaces mucho las maletas?–Voy a Sevilla todos los meses, cuando necesito
un baño de cariño de mi familia, de
mis amigos. Cuando llega el fin de semana
y no estoy con mi hija me voy a otra ciudad
a cantar, por lo que me obligo a hacer y
deshacer maletas.
–¿Te llevas hojas secas?–A veces sí, pero otras me llevo ramas
fuertes de amistad, como en Córdoba.
–Decía Lorca que ser universal es
escribir de tu pueblo, pero desde el
alma.
–El disco La vida secreta de Peter Parker
lo escribí en Madrid y allí empezaron a
surgir canciones que hablaban de mi ciudad,
supongo que porque la echaba de menos,
y de la amistad, y de lo que no tenía ya
cercano. Pero supongo que eso es inevitable,
es parte de la nostalgia.
–¿Por qué comparas al futuro con
un invernadero?
–Porque todo se está volviendo muy artificial,
incluso la comunicación. Hemos perdido
la cercanía. No en el cien por cien de
los casos, porque hay gente que sigue valorando
la cercanía, el poder tocar el hombro,
decir las cosas a la cara... pero nos
queda un futuro incierto, de invernadero,
porque esto va a ir a más y se volverá más
artificial.
–Incluido el amor.–Me escandaliza cómo la gente recurre al
ordenador para buscar pareja. El amor no
se encuentra delante de una pantalla de
ordenador; el amor se encuentra en la calle,
en una mirada, en un gesto, en la valentía
del chico al decirle a la chica que me
gustas; no creo en el artificio de Internet.
–Sin embargo, a la música le ha venido
muy bien.
–Sí; de hecho, mi primer videoclip lo
grabé con las aportaciones económicas de
seguidores en la web.
–Tienes muchas influencias en el
cómic.
–Sobre todo en el último disco, que es una
metáfora de las dobles vidas. Peter Parker
es un tipo normal, con problemas
económicos, con su jefe, con su tía, pero
luego se encara y lucha contra sus enemigos.
Mi parte de Peter Parker es la del día a
día, y otra es la música, que a veces me hace
sentir como alguien grande.

ENTREVISTA PUBLICADA EN EL PERIODICO "EL CORDOBA" EL PASADO VIERNES 11 de FEBRERO DE 2011 por JOSE JUAN LUQUE, finde@cordoba.elperiodico.com

3 comentarios:

Joaquín Pérez Azaústre dijo...

Entrevista de fan, fan. Muy bonita y griposa. Como se nota que no has seguido mucho al bueno de Kal-El... ¿Y la Fortaleza de la Soledad, en la que tú te afirmas cada día, en ciertas dosis impresdindible para la creación? Enhorabuena y abrazos arácnidos amigo mío!

MIGUEL ANGEL dijo...

Como se nota a la gente de gran corazón....no se si será por sus palabras, su manera de transmitir, su manera de contar las cosas o ese sexto sentido, pero aunque tu digas que el mundo de internet no vale para ciertas cosas, querido Manuel, hay otras que ni tan siquiera el hilo telefónico, transmitiendo electrones a toda velocidad, son capaces de ocultar cuando se trata de buena gente como tu, y como se dice en tu bendita tierra... y es que se nota la sinceridad que transmites, aunque no vea tu mirada como comentas, intuyo con ese sexto sentido que eres grande por dentro, seguro que bastante más que por fuera. Un fuerte abrazo y bonita, muy bonita entrevista, sincera y cercana.

Miguel Cobo dijo...

Nuestros días son cada vez más rojos desde que conocimos la vida secreta de Peter Parker. Dicho de otro modo: No nos cansamos de escuchar tus CDs.