Así se llama el nuevo disco de Vetusta Morla. Acabo de comprármelo pero aún no lo he oído. Necesitaré un par de columnas para hablar de él más en profundidad porque antes debería hacer hincapié en cómo me atrapó el anterior trabajo de este grupo madrileño. Un día en el mundo llegó a convertirse en la banda sonora de un viaje que cambiaría el rumbo de mi vida. Un viaje en coche. Cuatro ciudades en cuatro días. Pequeño Salto Mortal o Copenhague fueron canciones que me ayudaron a llevarlo a cabo con mayor fuerza y decisión. ¿Puede un disco hacer todo eso? Creo que sí, pero si no me crees puedes comprobarlo tú mismo. Para mí oír un disco nuevo por primera vez tiene mucho de liturgia. Lo que no sé es si debo exigirle a Mapas que vuelva a ayudarme a afrontar nuevos cambios o nuevos retos. Es probable que las respuestas a estas preguntas se resuelvan en las primeras escuchas. Te lo diré pronto.
Publicado hoy martes 7 de junio de 2011 en "El Diario de Almería"
2 comentarios:
Ay, qué tesoro tiene el Diario de Almería contigo... Y también Vetusta Morla.
Un abrazo, Príncipe!
Lo mismo me ha pasado con ese disco de Vetusta, me genera todas las sensaciones que se pueden generar en alguien y en el corto tiempo fuera del tiempo (como diria el Perseguidor de Cortazar) que dura cada canción.
De tu nota anterior también me gustan Rice y Delpi... gustos en común Manuel, aparte de las impresionantes letras de Rodolfo.
Besos para ti
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